Aclaración: El artículo que sigue se ha transcripto textualmente, tal como apareciò en la revista Folklore. Sin embargo, creo necesario aclarar que María Helena nació en Remedios de Escalada, y no en Banfield. La calle que pasa frente a la casa donde vivía María Helena separa Remedios de Escalada de Banfield. Supongo que ella dijo "nací aquí", y el periodista, creyendo que estaban en esa localidad, escribió "nací en Banfield". El error se repite en otras partes del reportaje, probablemente por el mismo mecanismo. Su hermana Elena manifestó que "los periodistas se confunden, porque enfrente de la casa es Banfield".
EL
FESTIVAL
DE
POSADAS
SE
LLAMO:
MARIA
HELENA
UNA NUEVA
VOZ QUE
TRIUNFA
PADRE GRIEGO,
MADRE RIOJANA...
HIJA CON
VOCACION LITORAL
El comentario fue unánime: el Festival de Posadas fue la consagración definitiva de María Helena, la joven voz litoral que ya había empezado a conocerse a través de un 33 simple lanzado en junio del año pasado. Hace mucho tiempo queríamos hablar con María Helena. Pero esta niña espigada y ojos claroscuros es difícil para ubicar... Tal vez tiene la modestia que le viene de su sangre riojana, que le viene por vía materna. Finalmente pudimos localizar a María Helena a su regreso de Posadas y nos dispusimos a hacerle la nota que hace tiempo nos reclamaban muchos lectores de FOLKLORE y que la justicia nos imponía.
PRIMER FESTIVAL
-Nací en Bánfield hace 19 años... Mi papá es griego, cretense, oriundo de una isla llena de viejísimas tradiciones y donde el pueblo celebra todo lo que ocurre a través del canto y la danza. Tal vez me ha llegado de esa sangre helena mi gusto por las canciones. Mi madre es riojana y yo voy mucho a La Rioja: es una provincia que me encanta...
-Pero canta cosas litorales...
-Porque quisiera cantar en serio lo de La Rioja y de esa zona noroeste, tan caracterísca.
-¿Eso quiere decir, que las cosas litorales no las canta "en serio"?
-¡Claro que sí! Yo canto todo en serio. Poniendo el alma en el canto... Pero quiero decir que cuando un tipo de música es tan singular, tan característico, como es la de La Rioja, requiere una preparación especial.
-Adelante, entonces...
-He vivido siempre en Bánfield. Y siempre he cantado. Hace once meses, un sacerdote de Lanús me pidió que fuera a cantar en una fiesta escolar. Me pareció absurdo, porque jamás hábía cantado en público. Pero insistió tanto este sacerdote, que fui. Ocurrió que estaba allí un representante de "Remates Musicales" de Canal 9, y después de escucharme me dijeron que fuera por el Canal, que allí me esperaban para que yo actuara. Dejé pasar como tres o cuatro meses y un buen dia caí por el Canal. Cuando llegué me sorprendí que se acordaran de mí. Al otro día debuté en "Remates Musicales", Y allí empezó todo...
-Pero ¿cómo siguió?
-Bueno, se fueron dando las cosas de manera muy casual. De "Remates Musicales" el señor Roberto Galán me llevó a Editorial Julio Korn; de aqui me presentaron en Columbia, donde conocí a Hernán Figueroa Reyes. Me hicieron grabar una cinta y al mes estaba en la calle mi primer disco: "Ribereña" y "Canto Islero".
-Volviendo al interrogante anterior, ¿por qué canta canciones litorales?
-Porque me siento mas cómoda. Probablemente tienen una modalidad, una dulzura que conviene a mi temperamento.
María Helena, en su extrema juventud, tiene una seguridad y una firmeza en sus juicios que sorprende. Una tonada provinciana indefinible, pacifica aún más su voz.
-Ahora ya salió el long-play que estuve preparando. El título es: "La Nueva Voz del Folklore Argentino", me parece un poco pretencioso el título, pero así lo han hecho en la Grabadora...
Se ríe y la vemos todavía más joven, casi una niña...
-Casi todas son canciones nuevas, las que se incluyen en el long-play "Lucerito Alba" y "Galopera" son los únicos ya conocidos. Los otros son novedades... ¿A cuál de les canciones nuevas le tiene más fe?
-"Mi Serenata" de Fermín Fierro. Y "Sol del litoral" de Luis Ferreyra, que en el festival de Marcos Juárez tuvo mucho éxito. Tanto que allí me bautizaron a mí como "Sol del Litoral"...
-¿Festivales?
-Solamente en Misiones y en Marcos Juárez. Acabo de venir también de San Lorenzo.
-¿Cuál le pareció el mejor, desde su punto de vista?
-Bueno... el de Posadas. Es el que tiene más gratos recuerdos para mí. La gente fue muy buena conmigo... Piense que era la primera vez que me presentaba ante una cantidad de público tan grande.
-¿Cosquín?
-Creo que sí. Baradero, seguro. Probablemente el Latinoamericano de Salta.
-¿Le gustan los Festivales?
-Mucho. Hay mucha gente y una puede darse cuenta "en vivo" de lo que gusta o lo que no gusta... Es una confrontación indispensable para el artista.
-Cuando no canta, ¿quá hace?
-Soy maestra. Ejercí durante un año en Bánfield. Después tuve que renunciar porque se me planteaban muchos problemas con motivo de mis compromisos artísticos. Pero sigo siendo maestra y cuando pueda organizar mi vida incluyendo el canto, trataré de seguir enseñando porque es en mí una real vocación.
-¿Tiene hermanos?
-Una hermana mayor.
-¿Novio?
-Absolutamente no.
-¿Absolutamente no?
Y ahora María Helena no se anima mucho a negarlo tan rotundamente...
-Pasemos a otro tema. ¿Qué le gusta leer?
-Psicología infantil. Es lo que más me gusta y libro que cae en mis manos sobre el tema, no dejo jamás de leerlo.
-¿Algún hobby, alguna preferencia?
-¡Cantar! Apenas sé tocar un poquito la guitarra, pero en casa me la paso cantando... Tanto, que mis padres me piden por favor, a veces, que me calle... Pero mientras ese pedido no me lo haga el público...
-¿Algo más, María Helena?
-Bueno... quiero decir que lo más lindo de todo esto es saber que si a mucha gente le gusta como canto, casi todos me quieren por lo que soy. De modo que uno anda en estas aventuras artísticas sin dejar de ser humano... Eso es, tal vez, lo más grato de todo.
Y con una sonrisa ancha y blanca -tan blanca como las paredes encaladas de esa isla del Mediterráneo, de donde le viene el gusto por el canto- nos deja esta joven triunfadora, María Helena, mezcla de helena y riojana, litoral por vocación y adentrada ya en el favor popular.
Felipe Cárdenas (hijo)
Fuente: Revista Folklore Nº111
(10 de enero de 1966)